El día veintiseis de julio de 2012, llegué al lago Sevan. Paseaba por la orilla del lago, esperando la mágica hora del atardecer y allí, ella salió de las aguas, a mi encuentro.
Esta vez no vas a poder descubrirla. Pero seguramente encontrarás otra. Si es así ¡¡¡YA NO TIENES EXCUSA PARA NO RETRATARLA!!! ¡¡¡RETRÁTALA y MÁNDAMELA QUE ESTARÉ ENCANTADA DE PUBLICARLA!!!